Adiós 2015

Por fin te has ido!

A tomar por saco 2015, qué ganas de mandarte lejos, lejísimos, y de darte un buen puntapié!

¡Empecé tu camino con tantas ganas!

Cambié el nombre del blog, me programé para escribir asiduamente, tuve mil esperanzas y creí que mi bebé nacería en tu seno.

En Enero no te hiciste notar mucho. Ni fu ni fa. O no lo recuerdo.

En Febrero, coincidió mi segunda ovo con uno de los peores momentos de mi vida. Mi hermano sufrió una hemorragia cerebral que, por un milagro, no se lo llevó para siempre (¡y encima tendré que agradecer a 2015 que no fuera todo lo malo que pudo ser! ¡releches!). Operación quirúrgica de 12 horas (él), idas y venidas de cientos de kilómetros (yo), transferencia de dos blastos yo), idas y venidas de cientos kilómetros (yo)...

En Marzo, beta negativa  (a 10 días de mi boda). No es que todo fuera malo, noooo, en marzo, para compensar lo malo, mi chico y yo nos dijimos "hasta que la muerte nos separe", en una ceremonia intimísima (sin casi nadie y sin nadie de mi familia directa por razones médicas), y nos fuimos a París 4 días (¡2015 tio! mi maridito estuvo super malito con gripe y asma, ¡en esos 4 días! ¡ya te vale!).  Así que nos queda pendiente una celebración por todo lo alto y una buena luna de miel. Para rematar Marzo, el día de nuestra boda me entero que una de  mis cuñadas está embarazada (¡de la misma semana de mi transfer!) ¡coño cuánto pude llorar!

Retraso mi transferencia hasta Mayo por varias razones, fui una cagona ;(.

Después mi regla se niega a bajar, verano de médicos, ginecólogos que me ven quistes ováricos y paraováricos, y que me piden pruebas en Noviembre. Hematóloga. Inmunóloga. Maravillosas profesionales. Eso también fue bueno, me encontraron cositas que debo subsanar, a ver si hay suerte.

En Septiembre, tras varios meses sin regla por los quistes, empiezo a manchar, poquito, pero me duran los manchados un mes, ¿!qué  mierda le pasa a mi cuerpo?!. Menos mal que mi gine de siempre ha vuelto. Anticonceptivos y empezamos un ciclo ... ¡releches! desde Febrero y estamos en Septiembre. Septiembre terrible, mi padre se rompe una cadera, hala otra vez a viajar a lo loco.

En Octubre se regula mi cuerpo, y le hacen a mi hermano una arteriografía, otra vez a viajar, ¡que mi pobre madre con mi papi ya tiene bastante! Hala, combino todo esto con el inicio de meriestra ... ains que parece que me pongo en marcha.

Noviembre me patea el trasero, y el resto de costados, me cancelan la transferencia a dos días de la misma, ingresan a mi suegro en el hospital y nace mi sobrina (la que se gestó cuando mi transferencia fallida allá por febrero) ¡no hay río para tantas lágrimas!

Diciembre culminó un 2015 para quemar, me operan, y mi regla vuelve a esconderse, Caperucita Roja (como dice Nube), no juegues al escondite, que el Lobo te va a comer. Así que el 31 llamo a mi gine, y me dice que me haga una prueba de embarazo, y que si es negativa que empiece con la proges para traer a Caperucita Roja de los pelos. El test fue negativo, por supuesto.

Así que 2015, te has portado fatal, has sido más malo que bueno, ¡un desastre! Has estado cargado de enfermedades, disgustos, lágrimas y discusiones.
Y no sólo te has portado mal conmigo, también lo has hecho con quienes amo, y con una gran parte de mi querida #infertilpandy. Aunque sé que has tenido cosas buenas para mucha gente. 

Pero necesito purgarme y purgarte, purificarme y purificarte. Y por ello, 2015, prometí quemarte, mes a mes.

Así que voy a iniciar mi "purificación" de la mejor forma que sé.

#ALaHoguera2015

Y espero, como el Ave Fénix, resurgir de mis/tus cenizas. Porque tras quemarte he iniciado mi conjuro a Caperucita Roja.